martes, 26 de marzo de 2013

Confiando en la Tormenta





Con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas estarás seguro; Salmos 91:4


Está lloviendo ya lo sé, y por más que ores no para de llover, pero solo quiero decirte que sigas perseverando, sigue presionando, pronto pasara. Aunque no veas asomarse la luz del sol, aunque no sientas más calor, quiero asegurarte Dios está al control. Noches de tormentas, noches de inundación, te hacen sentir sin dirección, recuerda sus promesas, medítala en tu corazón.


¿Acaso no dice su palabra, aunque andes en valle de sombra de muerte no temerás mal alguno? Afirma y aférrate a la bendita esperanza de que Jehová tu Dios está contigo…

El no te dejara, el no te desamparara, el te cubrirá y bajo sus alas estarás seguro, pero debes confiar… confiar en sus promesas, insistir en sus palabras, aferrarte a ella y seguir orando a través de la tormenta… si das esto pasos te aseguro que su respuesta no tardara en llegar. Quizás pare de llover y resplandezca el sol de esperanza en tu vida, o puede que siga lloviendo pero no te mojaras porque él te estará cubriendo con su santo manto hasta que poco a poco vaya cesando la lluvia en tu vida, en tu corazón.


Mi deseo es que este escrito calme los pensamientos de tormenta a quien lo lea, (como calmo los míos al escribirlo) y bendiga grandemente a la persona que lo lea. Créale a Dios, el es más que Real.


By,
R.P.-

Vive el Tiempo intensamente.






Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.
Ecle. 3:1



Dicen que el tiempo cura todo, pero yo me atrevo a decir que no se lleva los buenos recuerdos vividos junto a buenos amigos. Ayer estuve compartiendo un ratito con 2 de mis adorados amigos, hace mucho que no lo hacíamos, la vida y su evolución ha dificultado las cosas pero el cariño sigue siendo el mismo y para mí es como si el tiempo nunca pasó y seguimos siendo aquellos jovencitos que se podían pasar noches enteras riendo hasta más no poder; sin preocupaciones, sin grandes responsabilidades y sin ningún tipo de prisa.

Ayer también tuve una divertida videoconferencia con una muy buena amiga que ya no está en el país. Así como también una larga conversación telefónica con otra de mis queridas amiga que vive en el interior.

La nostalgia se aferra a mi mente y me hace reflexionar en “El Tiempo”, en todo ese tiempo que perdí cuando los tenía a todos cerca de mí, quizás en cosas sin importancia, en discusiones vanas y hasta días sin hablarles solo por un orgullo sin sentido. Ahora, por más que quiera cambiar las cosas no puedo, solo me quedan las experiencias vividas y el agradecimiento de tenerlos en mi vida no importando las circunstancias. También me queda la enseñanza de que debemos vivir este momento intensamente y disfrutarlo con todo nuestros sentidos, ya que al final, es el presente en donde vamos construyendo esas experiencias para ser depositadas en el banco de nuestra memoria convertidas en esos gratos recuerdos…

El Tiempo corre y no se detiene a esperar que nos decidamos, así que aprovéchalo al máximo viviendo el HOY intensamente…


Por. RP

miércoles, 20 de marzo de 2013

Sueños Rotos







“Entonces David rogó a Dios por el niño; y ayunó David, y entró, y pasó la noche acostado en tierra.” 2 de Samuel 12:16

¿Alguna vez has deseado algo con tanta fe, fuerza y confianza, que es en lo único que piensas y ruegas a Dios por ello insistentemente? Te mantienes en oración constante, lloras, haces largos días de ayuno, prácticamente tumbas las puertas de los cielos con tus suplicas, y tus días se hacen interminables por la ansiedad emocional y física que te causa esperar el resultado de ver tu anhelado sueño convertirse en realidad. Mientras, en tu mente ves todos los escenarios posibles según sea el resultado de tu pedido. Quizás te emociones al pensar que la respuesta será SI, puede que te ilusiones al pensar que has logrado convencer a Dios a moverse en tu favor. Hasta que por fin llega la respuesta, tristemente, ves todas tus ilusiones derrumbarse y no hay nada que puedas hacer, Dios ha decidido que tiene algo mejor para ti.


Mientras yo pasaba por una experiencia similar, una muy buena amiga me recomendó leer la historia de David, donde este oro y ayuno, pidiendo a Dios misericordia ante el enunciado de que su hijo iba a morir. Puedo imaginar los días de desolación y desesperanza en el corazón de David, así como también aquellos días en los cuales su corazón se lleno de esperanza y planificaba en su mente actividades junto a su hijo, porque mientras este estuviera vivo, Dios podía cambiar su decisión. David, no dudo ni un segundo que Dios podía cambiar de parecer, insistía y persistía día y noche sin cesar, apelando a la compasión y amor de su padre celestial. Hasta que llego la hora más temida por él, la hora de la respuesta… Lamentablemente, no logró convencer a Dios y la voluntad del Todopoderoso se impuso.


Lo que verdaderamente me impacto de esta historia fue la actitud de David ante la respuesta. La biblia dice en 2da de Samuel 12:20 que este se levanto, se ungió, se cambio de ropa y entro a la casa de Jehová a alabarle. Bendito sea este hombre, que lección de vida resulto ser para mi, que en vez de alabar y aceptar, hago resistencia hasta resentirme con el Señor por no darme lo que yo con tanta insistencia le pedía. Recibí el mensaje, DIOS ME AMA, tiene un plan para mi, y me dice: “Porque yo sé los planes que tengo para ti” ”pensamientos de bien y no de mal, para darte un futuro y una esperanza. Jeremías 29:11, Mis planes resultan ser huecos, ante la divina providencia. David, después de ver su sueño roto, inmediatamente recibió una gran bendición, su hijo el sabio Salomón.


Confiemos en que lo mejor está por venir, porque Dios tiene algo mejor para nuestras vidas.



Con amor,
R.P.-

martes, 19 de marzo de 2013

1 km más





“He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe"

He declarado el año 2013, como el año de las victorias. Es por eso que me levanto a las 5:00am a orar y escudriñar las escrituras y luego a las 6:30 salgo a correr.

Siempre desee implementar el hábito de correr pero cada vez que lo intentaba desistía de la grandiosa idea, pero esta vez me decidí a continuar a pesar de... No puedo negar que al principio me costaba levantarme, era difícil pero no imposible, me decía a mi misma, vamos! Eres una ganadora, tu puedes! Tuve algunas que otras complicaciones, me dolía mucho el cuerpo hasta tal punto que me dolía reírme. Los pies de los dedos se pelaban por la fricción y el sudor y varias veces llegaba sangrando pero aún así al día siguiente volvía a levantarme a correr. Confieso que en mis inicios no corría ni 1 km pero a través del tiempo y la perseverancia corro hasta 6 km corrido.

quien lo diría ? Espero día a día seguir avanzando y aumentando hasta sobrepasar la meta.

Meditando en todo esto antes descrito, viene a mi mente la comparación del apóstol Pablo donde dice que la vida del cristiano es como una carrera, nos insta a correr con paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en la meta, puesto los ojos en Jesús.

Muchas veces en mi práctica diaria me encuentro personas que me motivan a seguir, otras me animan a acelerar el paso y otras que lamentablemente sólo aportan mensajes negativos y descalificativos que no aportan en lo absoluto. Así suele pasar en la carrera del cristiano, encontrarás situaciones y personas que te ayuden en tu crecimiento, otras que corran junto a ti dándote palabras de esperanza, y lamentablemente otras que te desanimen, haciéndonos más difícil y doloroso el levantarnos.

Sólo me resta decirte que aunque te resulte doloroso continuar porque tu espíritu llora, tu alma sangra, debes obviar todo este dolor negativo y poner los ojos en el autor y consumador de la fe. Aunque estemos agotados y nos sintamos derrotados debemos mirarle fijamente, pensar en los resultados que obtendrás al correr 1 km más... Cuando corras la carrera de la fe, siente que el amor de Jesús te acompaña y ten confianza de que el mismo corre contigo...

Con amor,
R.P.-

martes, 5 de marzo de 2013

Refinándome a través de las pruebas




Refinándome a través de las pruebas



Y a los que aman a Dios todas las cosas le ayudan a bien…



Si de algo estoy segura es que estoy siendo fuertemente probada por la mano de Dios. No puedo negar que estoy pasando por momentos de mucho dolor, oscuridad, incertidumbre, miedo. Por situaciones que me hacen sentir muy insegura y sobre todo manejando mucha soledad. Pero hay algo que debo confesar, extrañamente mi vida espiritual está creciendo, mi relación con Dios está siendo fortalecida y mi mente ha alcanzado niveles de sabiduría que jamás imagine experimentar.


Irónicamente estos síntomas negativos que azotan mi vida de manera despiadada han hecho mi búsqueda de Dios más genuina, mas autentica, más profunda; elevándome a través de mis circunstancias. ¿Quién lo diría? Una pecadora como yo, sentir al maestro cara a cara abrazándome y susurrándome al oído: “resiste un poquito más solo quiero refinarte, pulirte, moldearte, se que duele, pero será a tu favor… WOW! No lo comprendo, resulta abrumador para mi entender su plan de salvación para mi vida… y sobretodo “Resistir” en momentos donde hasta respirar duele. Pero, YO elijo Resistir aunque duela, mientras seguiré alabándole, sirviéndole, esperando en su bendita promesa de a los que aman a Dios todas las cosas le ayudan a bien.


By,

R.P.-